MUCHAS SON LAS VECES QUE TENGO GANAS DE PINTAR, PERO NO LAS SUFICIENTES COMO PARA PONERME A PREPARAR TODOS LOS ALTARITOS. EN ESTOS MOMENTOS ME ENCANTARÍA TENER LA CAPACIDAD DE PODER PINTAR CON LA MENTE.
YO NO QUIERO MOVER OBJETOS, NI CONOCER LO QUE PIENSAN LOS QUE ESTÁN CONMIGO, YO SÓLO QUIERO PODER PINTAR CON LA MENTE, DAR LAS INSTRUCCIONES NECESARIAS PARA QUE VAYAN SURGIENDO EN ALGÚN LUGAR DETERMINADO LAS PINTURAS QUE PUEBLAN MI CABEZA; O, MEJOR, DEJARME LLEVAR, COMO CUANDO LAS HAGO FÍSICAMENTE, Y SORPRENDERME DE LOS RESULTADOS. ¡QUÉ GUAY!
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